6.2 – Marco jurídico, legislación fiscal

En este post hablaremos del marco jurídico y la legislación fiscal, es decir, los impuestos. Por tanto, explicaremos los distintos tipos de impuestos y sus características.

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Podcast:

Apuntes:

Introducción

Las empresas deben tomar decisiones para lograr el éxito empresarial. Para ello recurren a la contabilidad como principal fuente de información económica. La información económica permite que las decisiones tomadas sean las más apropiadas.

Desarrollo

Legislación tributaria

La legislación tributaria está formada por la Ley General Tributaria, que establece el marco jurídico para el desarrollo de los diferentes impuestos y reglamentos fiscales, estabiliza la estructura y el funcionamiento de las entidades, y establece los procedimientos para la gestión de los impuestos.  

La ley fiscal surge de la necesidad del   Estado, que actúa como agente económico, de obtener ingresos para cubrir el gasto público. Este gasto se recoge en detalle en los Presupuestos Generales del Estado.

Impuestos

Los impuestos son el tipo de ingresos públicos más importantes. Además, son obligatorios para los contribuyentes y su propósito es obtener los recursos necesarios para financiar los gastos, o controlar la actividad económica del país (políticas macroeconómicas).   

Podemos clasificarlos en

• Tasas: prestaciones de dinero realizadas a una entidad pública, en contraposición a un servicio público o por la realización de una actividad que proporciona un beneficio directo al usuario.
• Contribuciones especiales: tributos que permiten que el estado proporcione un servicio público administrativo. El dinero se ingresa por parte de un particular, pero los beneficios obtenidos son para toda la comunidad.
• Impuestos: pagos exigidos por las administraciones públicas sin que exista una contraprestación directa para el contribuyente.

Existen dos tipos de impuestos: directos e indirectos.  

Los impuestos directos recaen directamente sobre individuos o empresas, ya sea porque se ha obtenido un beneficio o por el uso de una propiedad.   

Por otra parte, los impuestos indirectos gravan las transacciones o actividades que las personas realizan, así como el consumo de bienes o servicios.

Elementos de los impuestos

Los impuestos están compuestos por los siguientes elementos:

• Hechos imponibles: circunstancias previstas en la ley que requieren la aplicación del reglamento fiscal (ingresos, compra de un activo, etc.)
• Base imponible: importe sobre el que se asigna el tipo impositivo en dinero.  
• Base liquidable: importe que resulta de restar a la base imponible los importes que la ley permite a cada impuesto.  
• Tipo impositivo: porcentaje que se aplica a la base liquidable. Si el impuesto es proporcional, el tipo impositivo es único o constante, independientemente de la base imponible. Si el impuesto es progresivo, el tipo o porcentaje aplicado a la base varía a medida que aumenta la base imponible.
• Cuota tributaria:  resultado de la aplicación del tipo impositivo a la base.  
• Deuda   tributaria:  importe que finalmente se deposita con bonificaciones o recargos.  
• Contribuyente: persona física o jurídica sobre la que recae el impuesto. Puede coincidir con el sujeto pasivo

Impuestos directos

Dentro de los impuestos directos encontramos.

En primer lugar, el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Es                     personal, directo y progresivo; y grava los ingresos (ingresos procedentes de actividades económicas) de las personas según sus circunstancias personales.

A continuación, el Impuesto de Sociedades (IS). Es un impuesto directo y personal que grava los ingresos de las sociedades mercantiles. El importe que paga es proporcional al beneficio obtenido, aunque el tipo impositivo suele ser del 25%. Los contribuyentes deben presentar al final de cada año una declaración de sus resultados económicos.    

Por último, el Impuesto de Actividades Económicas (IAE). Es un impuesto municipal que se basa en que el importe a liquidar se obtiene de la aplicación de los tipos impositivos sobre las tasas municipales mínimas, aplicando algunos índices que implican el aumento de la tasa.

Impuestos indirectos

Entre los impuestos indirectos, destaca el Impuesto al Valor Añadido (IVA). El valor añadido es la diferencia entre el valor de las mercancías producidas y el coste de las materias primas y otros bienes intermedios utilizados para producirlas.  Cae sobre el consumo y grava las importaciones de bienes, las entregas de bienes y servicios, y las importaciones intracomunitarias de mercancías.   El ámbito de aplicación es el territorio peninsular español  y las Islas Baleares. Además, la atención médica y la educación están exentas de el pago de este impuesto.  

Actualmente, hay tres tipos de IVA; el superreducido (4%), que se aplica a los bienes de primera necesidad; el reducido (10%), que se aplica a la alimentación en general, archivos, museos, transporte, etc; y el tipo general, que se aplica al resto (conciertos, peluquería, restaurantes, tabaco, etc.).   

Conclusión

En conclusión, cabe mencionar que los impuestos son la fuente de ingresos más importante del Estado y deben basarse en el principio de equidad. Además, son obligatorios, por lo que su violación se denomina fraude fiscal. Para evitar que esto suceda, el Consejo de Ministros elabora anualmente el Plan Anual de Control Fiscal, en el que marca las líneas de acción y los sectores en los que es probable que surjan.

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